A Kadi le cortaron el brazo derecho de pequegnita; a la altura del hombro; a causa de una enfermedad. y sin embargo es una vàndala. Una de las peores del grupo. Solo tiene once agnos, es agresiva y peleona y cuando se enzarza con alguien no hay manera de separarla. Tambien es caprichosa y traviesa, y con ella lo unico que funciona es combinar premios con castigos. Por eso aunque la echamos de los talleres de por la magnana la he vuelto a meter en el grupo de teatro. El caso es que nadie se da cuenta de que Kadi es manca. Yo mismo solo me acuerdo cuando me pide ayuda para sacarle punta a un lapiz o cuando intenta dar volteretas de lado como los demas y se pega tremendos costalazos.
Abobo, y gran parte de Africa, es un poco como Kadi.Nos acostumbramos tanto a la miseria, a la escasez y la injusticia que vivimos sin darnos nunca cuenta de ello. La vida aqui es plena, como si no existiera otra. Personalmente hacia ya tiempo que me apetecia volver a estar en un sitio en el que las botellas vacias de agua mineral son un bien que jamas se tira y donde los lapices se apuran hasta que tienen el tamagno de una ugna.
En nuestro barrio, entre Abobo y Aikekoi, hay de todo; tenderetes para comer, un sitio donde venden pan por las magnanas, una canasta de basket, grifos para el agua. Tenemos incluso un cine, que es un sombrajo con una tele y un reproductor de DVDs dentro y un torneo de futbol en el que los jugqdores alquilan sus camisetas; hay quien se dedica a este negocio y si se le devuelven sudadas cobra un poco mas, poraue le toca a el lavarlas. Hay peluqueros que abren incluso de noche (supongo que por si a alguien le crece la pelusa del craneo a esas horas), futbolines medio rotos que se hunden en el fango pero te cobran tus diez francos y chavales que ofrecen moviles para llamar.
En el barrio tenemos tambien algunas casas. Me refiero a casas de verdad, con jardin, muros altos y antena parabolica. Son casas construidas por algunos politicos y otros ricachones del pais para sus amantes. Ellos viven en La Riviera en mansiones elegantes y lujosas pero mantienen a sus queridas en estos chalecitos construidos entre las chabolas y las calles degradadas y arenosas; por la noche, cuando pasamos por delante de la casa sale musica y en la puerta entreabierta dos matones, forzudos en sus elegantes camisetas negras, demuestran que el segnor ha venido de visita.
La costumbre -exclusivamente masculina- de las amantes oficiales es de las cosas que superan cualquier divison etnica o religiosa en este pais. En realidad Costa de Marfil es sin duda alguna el pais mas multicultural que he conocido jamas. Ninguno de mis nignos habla en su casa frances; cada uno tiene su idioma, el de su pueblo y sus padres. Hay mas de sesenta etnias e idiomas originarios de aqui. Tantos que los nignos aprenden frances en la calle porque es la unica manera de comunicarse con otros nignos.
Entre las etnias hay algunos rencores y mucha competitividad pero pocos problemas graves (la guerra civil, que ya esta casi acabada del todo) fue mas un problema de personalidades y lucha por el poder que un autentico problema de convivencia. Y con las religiones pasa lo mismo. La mayoria de los matrimonios son mixtos. Es incluso raro encontrar a nadie casado con alguien de su propia religion. De hecho la gente se casa por la via tradicional, es decir con las (baratas) ceremonias que marque la etnia de la mujer para la ocasion y solo al cabo de muchos agnos, cuando ya tienen hijos y han ahorrado suficiente, se casan tambien por lo civil y lo religioso. En el barrio hay muchos musulmanes, pero en verdad se les ve mas porque ahora estamos en Ramadan y se visten para la ocasion y rezan en las calles; las mezquitas son diminutas, cada una con su nombre escrito como si fuera un bar, y las horaciones se hacen fuera en esterillas tendidas sobre el barro. Pero hay muchisimas iglesias diversas, de las confesiones mas exoticas, en cada esquina y todas con sus fieles. Los catolicos se dejan ver menos aqui, pero son mayoria en el pais. El caso es que nadie le da mas importanvcia a la religion -la propia o la del vecino- que al tipo de cerveza preferida.
Un amigo de aqui me hablaba ayer de Africa. A la gente le gusta definirse ante todo como africanos. Y me segnalaba el detalle cierto de que aqui cuando uno para a un desconocido por la calle siempre lo llama "mon frere"; es decir; hermano. Sin duda es una frase hecha, pero tambien es una hermosa forma de solidaridad, de sentirse unidos. Me gusta cuando a mi tambien me llaman asi. Y a fin de cuentas a ratos estamos de verdad en Africa; comemos carne de rata, bebemos chapango y vino de palma y hay una magosta domesticada que nos muerde los dedos de los pies. Aunque haya barro por todos lados.
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